La octava entrega de la longeva franquicia de espionaje con Tom Cruise está atravesando problemas.
A los numerosos retrasos que ha ido sufriendo ‘Misión Imposible 8′ con los años por culpa de la pandemia y de la huelga de actores y guionistas, ahora se enfrentan a un obstáculo peor: el presupuesto ha sobrepasado los 300 millones.
Varios medios norteamericanos informan de que la accidentada producción ya ha superado tamaña cifra debido al sonado problema con un submarino que obligó a paralizar el rodaje de manera indefinida otra vez más.
Dada esta subida de presupuesto, la película tendrá que alcanzar los 600 millones de dólares solo para empezar a ser rentable (y visto lo visto, no es nada fácil).
El reto es mayúsculo y la mejor muestra de ello es la anterior entrega, cuyo coste aproximado fue de 291 millones y su recaudación acabó en los 567 millones de dólares. Si entonces ya se dijo que aquella no fue del todo rentable.