La Policía incautó 962 kilos de clorhidrato de cocaína que estaban impregnados en cueros de vaca de exportación que iban a ser trasladados desde el puerto de Buenaventura, el principal del Pacífico colombiano, a Países Bajos.

Una patrulla canina identificó el contenedor en la zona de embarque donde se encontraban los cueros de vaca y en cuyo interior «el canino detectó el olor característico, lo que dio la señal positiva para la presencia de sustancias ilícitas», informó este viernes la Policía en un comunicado.

«Gracias a esta incautación, se evitó la distribución de 2,4 millones de dosis en las calles de los Países Bajos (…) este resultado representa un duro golpe a las finanzas de las organizaciones criminales dedicadas al tráfico de estupefacientes», apuntó la Policía.

Este cuerpo de las fuerzas de seguridad ha incautado en lo que va del año más de 266 toneladas de cocaína. Este mismo jueves informó la incautación de 971 kilos de cocaína ocultos en un cargamento de azúcar en el puerto de Santa Marta, en el caribe colombiano, que tenía como destino el puerto belga de Amberes.

Estos decomisos se sumaron al realizado por la Armada en el Pacífico colombiano en el que fueron incautadas más de 1,3 toneladas de la droga y en el que capturaron a cuatro personas que transportaban el alijo en una embarcación.

Un avión Cessna S-550 Citation S/II, con bandera venezolana, permanece retenido desde las 6:58 de la mañana de este viernes 20 de septiembre en el aeropuerto Camilo Daza de Cúcuta.

La aeronave fue ubicada por radares en Maiquetía (Venezuela) y presenta una bitácora de vuelos con rutas similares en la frontera con Colombia desde hace al menos una semana con aterrizajes en bases militares como La Orchila (Isla venezolana).

Aunque el caso se maneja bajo absoluta reserva, autoridades aeroportuarias le confirmaron a El Tiempo el evento y aseguraron que el vuelo y otros movimientos de la aeronave están siendo indagadas.

Información preliminar señala que dos de los pasajeros son militares del régimen (rango mayor) y que llevaban armamento. Además, que confundieron la ruta del vuelo, que era doméstico, por eso no llevaban sus pasaportes.
Este diario investigó y estableció que la matrícula es YV-3226 y que ese mismo aparato aparece reportado en 2017 transportando a diputados chavistas desde Guayana Esequiba hacia Estados Unidos. Se trata de Hermann Escarrá.

El caso se conoce después de que el gobierno de Estados Unidos reactivó las sanciones contra la dictadura de Nicolás Maduro, tras el presunto fraude electoral que se tejió el pasado 28 de julio. Las sanciones incluyeron el decomiso de un JET en República Dominicana que usó incluso Álex Saab investigado por una megaoperación de lavado de activos vinculada al régimen.

El pasado 12 de agosto la misma aeronave fue vista en Cuba (parada frecuento del dictador Maduro) después de hacer varios viajes a la Cuenca del Orinoco.

Se desconoce si tenía la misma tripulación que está retenida en Cúcuta junto con tres pasajeros.
Autoridades aeronáuticas y de Policía están entrevistando al piloto para preguntarle por qué si el destino final era San Antonio del Táchira, terminó en Cúcuta.

«Es imposible que se trate de una equivocación y se indaga si fue una emergencia así como la carga y la identidad de los pasajeros«, señaló una fuente enterada. Fuentes del gobierno señalaron que se están enterando del tema para establecer contacto con sus pares y aclarar qué hay detrás del caso.

El ataque con explosivos a una guarnición militar en Arauca, que dejó 25 soldados heridos y tres muertos, tiene en máxima alerta a la Fuerza Pública y Militar en todo el país, sobre todo en la zona donde ocurrió el atentado.

Por la gravedad de la situación, el comandante de las Fuerzas Militares, almirante Francisco Cubides, dio a conocer a los más de 226 mil soldados, marinos y aviadores en todo el país la estrategia unificada con la que harán frente a la situación de orden público.

“El almirante les recordó a las tropas la importancia de las medidas de seguridad en todos los niveles y la actitud proactiva, la cual requiere de una vigilancia constante, preparación y acción decidida para anticipar cualquier tipo de amenaza y evitar ataques que afecten a las tropas y a la población civil”, informó la Institución.

Asimismo, se ordenó redoblar las medidas de seguridad en todas las unidades militares, tanto en las bases fijas como en las de patrulla móvil, aplicando rigurosamente la doctrina militar.