La Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia condenó a 8 años y 6 meses de prisión al exsenador barranquillero Charles William Schultz Navarro, por los delitos de tráfico de influencias de servidor público y concusión, en concurso heterogéneo y sucesivo.
Los hechos están relacionados con la influencia que ejerció el excongresista ante funcionarios de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada para que expidieran en 2009 una resolución para no renovar la licencia de funcionamiento de la empresa de vigilancia Cooperativa Nacional de Reservistas COOP. Reservis C.T.A., para en su lugar, concederla por el término de dos años.
Según la Corte, se conoció que Schultz Navarro, de 73 años, en contraprestación por su injerencia, realizó una exigencia económica a la cooperativa para su campaña política por $30 millones, representados en material publicitario.
Además, al exconcejal de Barranquilla también debían entregarle un porcentaje de los nuevos contratos suscritos por la compañía con posterioridad a la renovación del permiso de operación.
«Para la Sala, quedó probado que Charles William Schultz Navarro aceptó llevar a cabo las gestiones que los regentes de la empresa le propusieron, colocando la autoridad consustancial de su cargo al servicio de intereses particulares con el fin de que el Superintendente de Vigilancia y Seguridad Privada reconsiderara la primera determinación sobre la renovación de la licencia», concluyó la Corte.