Las autoridades en Antioquia le siguen apostando a debilitar el microtráfico en diferentes subregiones del departamento, es por ello que durante este fin de semana se realizaron diferentes operativos con los que afectaron las economías ilícitas como, por ejemplo, en Medellín, donde en el barrio Antioquia se hicieron cuatro diligencias de registro y allanamiento.

Según destacaron desde la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, se incautaron dos armas de fuego, un proveedor y 40 cartuchos de diferentes calibres y se lograron recolectar tres teléfonos celulares que eran usados por grupos delincuenciales de la zona.

«Durante las diligencias se incautaron dos armas de fuego, un proveedor, 40 cartuchos de diferentes calibres, además de 4.700 gramos aproximadamente de marihuana y bazuco, elementos para dosificación, celulares, notas contables y 920.000 pesos en efectivos», destacó el general William Castaño, comandante de la Policía Metropolitana.

Las autoridades iniciaron las investigaciones para esclarecer lo que llegó a este cruce de disparos de “fuego amigo” entre las fuerzas armadas.

En medio de la compleja situación que se vive en Antioquia por el plan pistola del Clan del Golfo, un enfrentamiento entre la Policía y el Ejército, en confusos hechos, se registró en el municipio de Carepa, en el Urabá antioqueño, dejando a un militar lesionado.

Los hechos se registraron sobre las 6:00 de la tarde del domingo del barrio Acaidaná, cuando se presentó la confrontación armada en medio de un operativo que realizaban agentes de la Sijín de la Policía Urabá y allí se encontraron con dos personas armadas.

“En el procedimiento observaron a dos ciudadanos con armamento de largo alcance, por lo que se produce un intercambio de disparos”, explicaron desde la Policía Urabá mediante un comunicado de prensa.

Esto ocurrió que se presentara un intercambio de disparos, sin saber que los disparos provenían del “fuego amigo”. Después se conoció que las dos personas armadas eran integrantes del Ejército, adscritos a la Decimoséptima Brigada, quienes habían salido de una patrulla a 500 metros del sitio de la confrontación.

Familiares y amigos lloran la muerte de Fernanda Henao Ospina, una adolescente de 17 años, tras el accidente que sufrió cuando practicaba “Gravity bike” en una vía del Suroeste antioqueño.

Fernanda realizaba esta actividad extrema con un grupo de amigos en la vía que conecta a los municipios de Amagá y Titiribí, un sector conocido por sus carreteras que han tenido alta peligrosidad y derrumbes constantes debido a las fuertes lluvias de la primera temporada de 2025 (marzo-abril-mayo).

Aunque se desconocen las causas que llevaron a la tragedia, algunas hipótesis apuntan a que Fernanda habría impactado contra un vehículo de carga cuando descendía en su bicicleta. Por ahora, las autoridades permanecen en la investigación del caso de esta joven oriunda de Santa Rosa de Cabal y residente de Dosquebradas, Risaralda.

Por otro lado, la comunidad deportiva hizo un llamado a la población sobre la importancia de cuidar la vida, frente a esta práctica que nació en Estados Unidos hace más de 20 años, y que es legal allá siempre y cuando cumplan con el uso de los implementos de seguridad: casco, rodilleras, coderas, entre otros.