En un hecho sin precedentes en la historia de Colombia, un expresidente fue llamado a comparecer ante las autoridades por presuntos líos judiciales. Se trata del exmandatario Álvaro Uribe Vélez, quien compareció virtualmente ante el Juzgado 44 Penal de Conocimiento de Bogotá para el inicio de un juicio oral en su contra, por supuesto fraude y soborno a testigos. La audiencia de acusación tuvo lugar este viernes, 17 de mayo.
La sesión comenzó a las 8:05 de la mañana. Desde su residencia, Uribe Vélez se pronunció sobre el caso del cual se le está acusando, criticando las actuaciones judiciales que han tenido lugar durante los últimos seis años. Este proceso judicial se remonta a 2018, cuando la Corte Suprema de Justicia abrió una indagación contra el exmandatario.
Las cuatro víctimas implicadas en el caso han pedido que el líder político, quien renunció a su escaño en el Senado y actualmente se encuentra en calidad de imputado, responda ante la justicia. Además, en una acción que podría ser crucial para el juicio, las víctimas anunciaron que entregarán a las autoridades un reloj con una grabación que se considera clave.
Esta grabación contendría la voz del testigo detenido Juan Guillermo Monsalve, a quien Uribe ha acusado de haber sido manipulado inicialmente para declarar en su contra, junto con la del abogado Diego Cadena, quien habría visitado cárceles para obtener testimonios favorables para el exsenador.
Ahora bien, durante la diligencia, tras la intervención de las víctimas para decidir quién sería su vocero, la defensa del expresidente solicitó la suspensión de la audiencia de formulación de acusación. Jaime Granados Peña, abogado de Uribe Vélez, argumentó que el escrito de acusación había sido modificado y que se habían añadido nuevos detalles, de los cuales se les informó poco tiempo antes de la diligencia.
“Para nuestra sorpresa, se nos informa muy cerca del inicio de esta audiencia que ha habido un escrito de adición, y sobre esa base del derecho que le asiste a la defensa”, señaló Granados.
La jueza 44 del circuito de conocimiento de Bogotá, Sandra Heredia, rechazó la petición de suspensión, indicando que la defensa había sido informada con la suficiente antelación sobre la adición al escrito de acusación. Según la jueza, esta información no afectaba la capacidad de la defensa para prepararse adecuadamente para la audiencia.
