La Superintendencia de Salud inició una investigación con fines sancionatorios contra la EPS Salud Total, luego de encontrar al menos once presuntos incumplimientos a las normas del Sistema de Salud.
Algunos de ellos, según la entidad de control, son no garantizar la entrega oportuna de medicamentos a sus afiliados, atención inadecuada a adultos mayores y mujeres en embarazo, reporte de información inconsistente, pagos inexactos de facturación, uso indebido de los recursos de la salud por préstamos y anticipos a su proveedor de medicamentos.
La serie de presuntas deficiencias por parte de la EPS fueron detectadas por un equipo auditor de la Supersalud durante una visita hecha entre el 9 y el 12 de abril de este año a las instalaciones del punto de atención de Salud Total en Bucaramanga.
Durante esos cuatro días, los auditores verificaron las condiciones en que se brindaba la atención al usuario y la dispensación de medicamentos, y a su vez efectuaron una revisión a los documentos, soportes y contratos que daban cuentan de la relación financiera entre la EPS y su gestor de medicamentos en esa ciudad, Audifarma.
En lo relacionado con la atención a los pacientes, los auditores advirtieron fallas en la asignación de turnos en la Oficina de Atención al usuario, largas filas hechas por usuarios que se extendían fuera de las instalaciones, encontrando presuntamente que no hay un trato preferente a personas de especial protección como mujeres en embarazo, niños, adultos mayores y personas en condición de discapacidad, quienes debían esperar mucho tiempo para ser atendidos.
Frente a la entrega de medicamentos, en el informe de auditoría se estableció que, con corte a marzo 2024, había un total de 15.397 medicamentos que después de 90 días no habían sido entregados a los pacientes, superando la fecha oportuna de suministro.