En la tarde del 20 de julio, Día de la Independencia de Colombia, diferentes puntos del país fueron objeto de hostigamientos por parte del Estado Mayor Central de las disidencias de la Farc.
El más reciente reporte de la comunidad se dio desde el corregimiento de San Luis, en Neiva (Huila), donde, al parecer, la estructura armada habría atacado a la estación de Policía.
Tal como se registró en el corregimiento de Potrerito, en Jamundí (Valle del Cauca), los habitantes grabaron con sus teléfonos celulares los ruidos de las ráfagas de fusil a pocos metros de sus viviendas.
De acuerdo con la Tercera Brigada del Ejército Nacional, los ataques se perpetraron desde la parte alta de la montaña contra la subestación de Policía del corregimiento. “En este momento se están presentando hostigamientos en Potrerito a la subestación de Policía. Les están disparando desde una parte alta. Ya están reaccionando las tropas del Batallón de Infantería número 8 del Batallón Pichincha y el batallón de Fuerzas Especiales urbanas número 4 que están en el sector”, afirmaron las autoridades.
Además, indicaron que es falso que haya patrullas de los guerrilleros de las disidencias recorriendo la zona afectada por los actos violentos.
Estos ataques contra la fuerza pública, y en el que ha quedado en medio la población civil que habita el corregimiento, se ejecutó mientras el presidente de la República, Gustavo Petro, realizaba su discurso en el Capitolio Nacional en Bogotá, en medio de la instalación del Congreso.
A través de redes sociales, usuarios han reportado la tensa situación que se vive en esa zona rural de Jamundí. Las ráfagas de fusil, incluso, se escuchan muy cerca de las viviendas donde conviven las familias.