La Dijin de la Policía y la Fiscalía, con el apoyo de la Oficina de Investigaciones Criminales del Servicio de Seguridad Diplomática de la Embajada de los Estados Unidos en Colombia, logró la captura de un total de 31 personas de una organización dedicada al tráfico de migrantes. Entre los capturados, según las autoridades, hay 3 funcionarios activos de la Registraduría y 3 de la Cancillería.
La banda delinquía en Barranquilla ofreciendo servicios de expedición de documentos colombianos falsos para migrantes de República Dominicana y de Venezuela. Entre los capturados también están los cabecillas de la estructura, un ciudadano dominicano y una mujer colombiana.
Las capturas tuvieron lugar en Bogotá y en municipios de los departamentos del Atlántico, Córdoba, Amazonas, Caquetá, Cesar, Sucre y La Guajira. Por la expedición de la documentación falsa, la Registraduría ha anulado 344 cédulas falsas que habrían sido entregadas por el grupo delincuencial, principalmente a migrantes dominicanos.
Capturan funcionarios de la Cancillería y Registraduría por tráfico de migrantes
“La organización cobraba entre 2.000 y 4.500 dólares por suministrar documentos irregulares a migrantes, quienes con esas aparentes identidades colombianas viajaban a México para cruzar por vía terrestre a los Estados Unidos. Algunos de ellos se dirigían a países europeos para quedarse del todo allí”, dijo el coronel Edwin Urrego, director de Investigación Criminal e Interpol de la Policía.
¿Cómo delinquía la banda de tráfico de migrantes?
Dos cabecillas eran los encargados de dirigir la banda de tráfico de migrantes, se trata de un ciudadano dominicano buscado en 196 países por el delito de tráfico de migrantes y concierto para delinquir y una ciudadana colombiana que trabajaba con un considerable número de colaboradores entre los que también estarían vinculados seis de sus familiares, todo un clan familiar.
Al menos 11 personas eran las encargadas de buscar a los migrantes para ofrecer, tramitar y obtener documentos adulterados. A su vez, 3 empleados activos y 6 exfuncionarios de la Registraduría estarían a cargo de ubicar registros civiles de personas no ceduladas para suplantarlas, mientras que 3 empleados y 3 extrabajadores de la Cancillería, se encargarían de “formalizar” en pasaportes las falsas identidades.
“Con esa documentación fraudulenta, que les daba apariencia de ciudadanos colombianos, los migrantes viajaban con facilidad por distintos países”, indicaron las autoridades, quienes afirmaron que los delincuentes serán imputados por los delitos de tráfico de migrantes, concierto para delinquir, falsedad ideológica en documento público y enriquecimiento ilícito.